Tuve un pedacito de cielo para mi anoche.
Y fue algo que nunca cruzo por mi cabeza.
Llego a mi, como la brisa fresca del atardecer, sin presentación.
De pronto el ambiente se tono cálido, apacible, seductor...y tu compañía se volvió un personaje principal en la escena.
No habían mas sonidos que tu voz, tus respiros...
El aire alrededor embriagaba mis sentidos, los cuales solo reaccionaban a los deseos propios del momento.
Un roce, una caricia...un beso...todo en sintonía y sin orden...
El mundo dejo de existir, de importar...solo tu y yo.
Aun en la oscuridad había luz...
Un momento perfecto, una fantasía real.
Un pedacito de cielo me cobijo anoche.
Una noche que se evaporo lentamente, trayendo una hermosa mañana.
Un día mas para recordar.
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