viernes, 27 de marzo de 2009

El diario de Brigitte Jones


No me canso de ver esta película...digo quizás no sea la mejor o peor que haya visto, pero me encanta ver como la protagonista crece en su persona. luchando contra el mal femenino mas común...estar pasada de peso.

Yo creo que, mas de una mujer, alguna vez pensó lo que ella muy graciosamente escribe en su diario, aunque puedo apostar que a nosotras no nos pareció tan gracioso.

Y entre todas las cosas curiosas de esa película, algo que me deja huella es el pensar que llega a la edad de treinta y tantos años y siente que la vida se acaba, que no encuentra el amor, que no la han tratado bien y se sumerge en depresivos episodios, en los cuales se auto tortura viendo películas románticas, comiendo grandes cantidades de helado (que en lo personal una vez lo intente y no llegue a bajar ni un octavo del envase), y tomando vodka en su departamento.


Otra parte que me llama la atención es cuando ella, va a presentar un libro en un evento social de su compañía y se dedica a buscar la ropa adecuada que la ayude a disimular su peso, incluyendo unas pantaletas tipo faja enormes ( bueno, quizá igual todas en algún momento hemos usado una de esas,pero creo que le falto buscarla en color negro, digo para que fuera de acuerdo a su indumentaria, y no las de color beige que era un contraste horroroso).


Muy a pesar de todo lo que sucede en esta comedia dramática, lo que se percibe es falta de seguridad en su persona, que la lleva a dudar de su propia capacidad, cuando en realidad tiene mucho que dar de si misma. Claro que todo lleva un aprendizaje, en cada actividad que realiza y que muchas veces la lleva al ridículo, hay una lección que considerar...


Pero después de lo anterior, a que viene la introducción...a que a veces yo me siento la protagonista de esa película...y no porque quiera parecerme a ella, sino que muchas veces he tenido las mismas sensaciones que ella. A menudo tendía a preocuparme por mi peso, y sentirme frustrada de no verme como mis demás amigas o compañeras, pero entendí algo importante, el día que dejó de preocuparme ese asunto, fue que comencé a sentirme mas segura y mas bella. Aclarando que no por eso, dejo de pensar en hacer actividades físicas que mi cuerpo requiere. Tengo treinta y tantos años, y quizá no tenga el prestigio profesional que tanto soné en algún momento, pero se me ha sido compensado con otras cosas que nunca habían pasado por mi mente y hoy tengo. Que hago cosas ridículas y saben que... no me interesa lo que los demás opinen... El amor puede ir y venir...puede lastimarme y hacerme sentir viva, pero lo importante es el momento...no lo que fue o lo que sera...

y otra cosa mas...yo llevo un diario y creo que podría ganarle a Brigitte en relación a sus anécdotas tanto tontas como sensatas...y creanme...cuando me siento a leer lo que escribo a veces hasta yo me pregunto...¿quien habrá osado plasmar esto? yo no creo haberlo hecho jajaja.